miércoles, 11 de marzo de 2015

Otro día sin sol...


Amanece otra mañana fria, lluviosa y sin sol
atesorando recuerdos inexistentes,
sumando nostalgias a los años.

Parece que la lluvia no termina de caer
nunca se seca la nube del dolor
que alimenta la soledad.

Pasa el tiempo y febrero vuelve a llegar
como en las peliculas, suceden los días
sin nada en particular: amanece-oscurece...

Los amañados proyectos
no reemplazan la ilusión,
ni alcanzan para crear emoción...

Sin el calor del sol,
insensible se vuelve el cuerpo
y pesan hasta los recuerdos.

A falta de movimiento, ofenden los sueños
por lejanos, irreales e imposibles,
cuando hasta la libertad agravia

Las perdidas oscurecen la mente,
la lluvia se ha vuelto rio de lagrimas
y en la penunbra se ha ido el amor

...Otro día sin sol, otro año sin ti, otra decada sin luz...

lunes, 9 de marzo de 2015

Mi gramito de oro



Existen tesoros que no se perciben fácilmente y por lo tanto no se agradecen lo suficiente: como estar vivo, degustar una rica comida, poder mirar al cielo o contar con un gramito de oro... 

Comparando tu amistad y compañía con algo tangible, he llegado a la conclusión que eres para mi un gramito de oro.

Me diras exagerado si te digo que eres lo mejor de mi vida, pero entiendo si no puedes sentir la tranquilidad que tu me brindas.

No viviría un día contigo, eso es verdad, tengo que reconocer que odio tu comida; pero te compartiría todas mis noches por sentir el olor de tu piel.

Tampoco me gusta tu look retro, sobretodo esa chaqueta de jean con parches, pero amo tu mano clandestina en mi pantalón y sentirme entre tus brazos.

Alguna vez mencionaste que yo para ti era una tapita de gaseosa... sé que lo decías en broma, pero aunque parezca poco, una tapa es vital para transportar el liquido dentro de la botella.

Pareciera a simple vista que no tenemos mucho en común, pero me gusta pensar que me recuerdas cuando escuchas cierta canción.

Como el sol y la lluvia haces parte de mis días, contigo los temas de conversación no se agotan, amo el apoyo incondicional que me brindas y que siempre me escuches.

No podría decidir que me gusta más si bailar contigo o saberte cerca, tu compañía siempre me hace sentir seguro... a salvo!... Como quien posee un gran tesoro: Un gramito de Oro.

Aunque no te lo diga a menudo, intento demostrártelo cada día, 
para que sepas que te quiero mucho, mucho más de lo que te puedas imaginar.