Gracias a Dios tengo grandes experiencias, muchas vivencias buenas y otras no tanto, fantásticos recuerdos que llenan el álbum de mi vida y aunque suene raro, no me arrepiento de ninguna de las cosas que he hecho -valga aclarar que he hecho grandes embarradas-, pero son las cosas que dejé de hacer las que pesan sobre mis hombros, esos "te amo" que se me quedaron sin pronunciar, esos "besos" que se me enredaron en los labios, todos esos "pude haber hecho" que ya no se pueden...
No espero ni deseo que mi pasado se repita, ni retomarlo, ni nada... tampoco me gustaría devolver el tiempo, aunque no parezca he aprendido a vivir bien parada en mi presente, a gozarme cada cosa que hago y los momentos que comparto con las personas que quiero guardando un bonito retrato de cada situación, viviéndola con el corazón... "vivir cada momento como si fuera, como de hecho lo es, único e irrepetible".
Confieso que hago un esfuerzo sobrehumano para no recordar las ofensas (pero no siempre me sale bien) aunque sé que ese resentimiento solo es un veneno que me estoy tomando para que a otro le haga daño... bueno, todos tenemos ¡algo por mejorar!
Ayer escuche una frase citada por Wayne Dyer que decía: "Este es mi pasado, se queda atrás! me despido de él con un beso ¡gracias! ¡Nunca me lo hubiera perdido!" Esa frase me calo hasta los huesos, me hizo recordar que es gracias a mi pasado que soy lo que soy hoy en día... fue mi maestro y mi guía, pero tengo que dejarlo atrás para seguir mi camino... no se puede avanzar mirando hacia atrás ¿Verdad?
No creo que vaya a dejar de escribir de vez en cuando de nostalgias, de esas que invaden mi mente en las noches justo antes de dormir o de las que llegan con una película o con un sitio de la ciudad, pero si quiero despedirme de mi pasado, para dejarlo atrás, me quedo con sus aprendizajes, fueron grandes lecciones: ¡Gracias!
A los grandes amores que he tenido y ya no tengo: ¡Gracias! fueron estupendos, pasé momentos inolvidables, hasta las peleas valieron la pena.
Me quedo con la Lida de hoy, la que es mejor persona que ayer; con los amigos de todos los tiempos: los que han sido, son y serán; con los sueños actuales que de pronto mañana cambian; con esta felicidad que invade mi alma y con un agradecimiento a Dios que no me cabe en el cuerpo... ¡Gracias por mi pasado!, de verdad, de verdad, ¡Nunca me lo hubiera perdido!